La gran mayoría de las personas que conozco me miran feo cuando les digo que me quedare en un hostal, aunque con el paso del tiempo han aprendido a aceptarme (creo),
para las personas que me conocen saben que generalmente soy “arriesgada”, bueno siendo realistas no es tanta mi intrepidez es mas mi razonamiento de para que quiero un super hotel si solo llegare a dormir.

Mi primer hostal fue en Machu Picchu, para empezar llegar hasta allá (yo soy de México) ya era toda una locura, recuerdo haber estado mas nerviosa por quedarme en un hostal “quien sabe con quien” que la misma experiencia de ir a este lugar tan especial.
Reserve con tiempo mi hostal, decidí quedarme en una habitación de 4 personas Mixta con baño incluido, en esta ocasión me quede en el hostal Ecopackers hostel, me baje del tren y comencé a caminar por las calles de Machu Picchu hasta llegar al Hostal, que por cierto se encuentra sobre la ruta de las vías del tren.

Llegue al hostal, me dieron mi llave y subí a la recamara, cuando llegue ya había una persona ahí, era un muchacho japonés con el que nunca hable teníamos una sincronización brutal, yo llegaba él estaba dormido, él llegaba yo estaba dormida, nunca coincidimos despiertos al mismo tiempo.
Estaba super limpio y la verdad la cama era cómoda, una de las cosas que me gusto fue el locker de madera que me asignaron, tenia un buen tamaño donde entraban todas mis cosas y para el que lleve un candado para cerrar. Eso si fuera a donde fuera siempre cerraba con candado.
Creo que no soy muy compatible con la comida de Perú (con esto no digo que no me guste) solo que los días que estuve allá básicamente comí lo mismo todos los días, cene, comí, cene, comí, cene, comí fácilmente por tres días unas tequeñas (sinceramente desconozco si era comida típica o solo algo que hacían en el hostal) eran una especie de triangulitos con queso y un guacamole espectacular.

Este hostal tiene en la parte mas alta un restaurant (que era donde comía) esta como “ al aire libre” me gustaba subir y desde ahí observar las montañas, siendo francos las montañas eran algo nuevo para mi, yo vivo en costa a unos 2 km de la playa, ver montañas es algo diferente para mi.
Fue muy divertido pasar ese tiempo ahí y mas por que básicamente estaba sola en la recamara, creo que esta experiencia me ayudo mucho para que en el futuro siga quedándome en Hostales.
Aparte de que gaste mucho menos que en un hotel, me dio la oportunidad de conocer personas, pase momentos muy divertidos.

Quizás lo mas divertido que me paso (aunque en el momento no lo fue) el ultimo día, me dormí con la ventana abierta por que se me olvido cerrarla después de que estuve de chismosa asomada la noche anterior, estaba dormida y de repente se escucho el sonido del tren como si estuviera encima de mi, di un salto y termine golpeándome en la cabeza con la litera, acto seguido me dio un ataque de risa.
Mi calificación a quedarme en Hostal fue un sobresaliente, quizás lo único de lo que me arrepiento es de no haberme quedado un día mas.
Kauldy